NARRACIÓN FICTICIA

NARRACIÓN FICTICIA

^{___________________________________}

Porfirio Díaz fue presidente de México por treinta y un años. Durante ese tiempo, un pequeño grupo de personas acaparó el poder; el pueblo no pudo opinar sobre sus problemas ni elegir a sus gobernantes. Mientras tanto, surgió una nueva generación que quería participar en la política y que no podía hacerlo porque todos los puestos estaban ya ocupados por hombres mucho más viejos.

Cuando Díaz afirmó que México se encontraba maduro para la democracia, esos jóvenes creyeron que había llegado el momento de participar. Uno de ellos fue Francisco I. Madero, quien consideraba que Porfirio Díaz no debería reelegirse. Por ello, fundó el Partido Antirreeleccionista. Pero el éxito de su campaña hizo que Díaz lo viera como un peligro y poco antes de las elecciones fue detenido y encarcelado en San Luis Potosí allí supo que Díaz había vuelto a reelegirse y en Octubre d 1910, escapó a los E. U. donde publicó el Plan de San Luis Potosí, en el cual convocó a todos aquellos que quisieran participar en un juego de rayuela, el ganador sería Presidente de la República. Mientras tanto, Díaz al enterarse de la noticia cayó en depresión y empezó a comer demasiado. Como consecuencia de ello, le dio dolor de muela, tanto fue el dolor que le impidió continuar con sus actividades diarias, pues se había reelegido y ya no podía más con la silla presidencial. Entonces decidió renunciar y viajó a Francia para que lo atendiera el mejor dentista del país.

Por otro lado, Francisco I. Madero resultó ganador por lo que asumió la presidencia en noviembre de 1911. Sin embargo, había descontento por parte de Victoriano Huerta porque acusaba a Madero de hacer trampa pero como no le comprobaron nada Madero siguió en el poder. Por su parte, Huerta ambicioso de poder, planeó hacer a un lado a Francisco I. Madero mandándolo a matar, con ayuda de su amigo el embajador de los Estados Unidos, Henry Lane Wilson. El crimen indignó a todo el país y Huerta tuvo que enfrentarse a quienes no estaban dispuestos a aceptarlo. Sin embargo el pueblo mexicano decidió nuevamente llevar a cabo otra convocatoria para elegir a su nuevo Presidente.

Finalmente, podemos darnos cuenta que desde ese entonces nuestros presidentes se eligen mediante la realización de diferentes juegos que entretienen a la gente, ya que los transmiten por televisión y que la lucha del poder continúa hasta la fecha.